martes, 26 de marzo de 2019

CURSO "EL IMPERATIVO EN ESPAÑOL"

Este curso está dedicado a los alumnos concluyentes o que están cursando el segundo año del CELEM en los colegios públicos de Paraná y que desean profundizar algo más en el aprendizaje de la Lengua Española, principalmente respecto al tiempo verbal IMPERATIVO, sea Afirmativo o Negativo. El curso tendrá la duración de veinte (20) horas, para certificación; sin embargo, el alumno podrá administrar su tiempo a su modo. Es un curso masivo, totalmente online y abierto a todos los interesados, pero hay que saber algo de la Lengua Española. La certificación sólo será emitida al alumno que haya concluido todos los ejercicios y realizado la tarea para la evaluación final: producción de un vídeo, con hasta cinco (5) minutos, que compruebe el uso del IMPERATIVO. Este vídeo puede ser producido individualmente o en grupo de dos, tres o cuatro alumnos, pero TODOS tienen que hablar y utilizar verbos en IMPERATIVO.

¡SED TODOS MUY BIENVENIDOS!

¡BUEN CURSO A TODOS Y TODAS!



Ved el vídeo:


Mirad las explicaciones gramaticales en las páginas 36 y 37 del libro JIMÉNEZ, Felipe B. Pedraza; CÁCERES, Milagros Rodríguez. Vamos a hablar. v. 4.







Ahora, mirad las páginas 61 y 62 del libro MARTIN, IVAN. Síntesis 3. São Paulo, Ática, 2012.




  Si no habéis entendido bien, revisadlo ahora mismo.

¿Ya estáis listos?

¡Muy bien!
Haced los ejercicios de las páginas 37 y 38 del libro JIMÉNEZ, Felipe B. Pedraza; CÁCERES, Milagros Rodríguez. Vamos a hablar. v. 4.

Enviad vuestras respuestas a la dirección:


laurajesusmc@gmail.com


Ejercicio 1: Transformad las oraciones según el modelo, de forma que aparezcan en IMPERATIVO con las variaciones de colocación de los pronombres que correspondan.
Ejemplo: Os ordené que me siguierais todos.
Seguidme todos.

a) Te dije que cogieras ese vaso, lo llenaras de agua y me lo dieras.
b) Os dije que vinierais rápidamente y que no tardarais mucho.
c) Le dije a usted que saliera con sus compañeros y que fuera hasta la parada de metro.
d) Te dije que corrieras y hablaras con el director.
e) Le ordené a usted que volviera mañana.
f) Le ordené a usted que no dijera nada y que cumpliera con su deber sin replicar.
g) Le pedí a usted que, por favor, repitiera la última frase.
h) Te advertí que no me pusieras las manos encima.

Ejercicio 2: Convertid en AFIRMATIVAS las sIguientes IMPERATIVAS NEGATIVAS:
Ejemplo: No me lo deis hoy  -  Dádmelo hoy.

a) No os la pongáis antes de salir.
b) No me lo recuerdes después de las siete.
c) No te las compres.
d) No os apuntéis esos teléfonos.
e) No nos recordéis la hora de la cita.
f) No le ayudéis.
g) No abráis la puerta de la calle.
h) No le quites el dinero.

Ejercicio 3: Completad el siguiente texto con la forma verbal que corresponda:

Cuando yo era pequeña, siempre nos decían lo mismo: “¡No (tú, hacer) __________________ esto, no (vosotras, hacer) ______________________ aquello!” Creí que, al hacerme mayor, esto iba a cambiar, pero no ha sido así. Ahora es casi peor. En casa, mis hermanas: “(tú, a mí, traer) ___________________ aquella revista”; mi madre: “Por favor, no (vosotras, llegar) ____________________ tarde”. Quizá lo peor es lo de la oficina. El jefe siempre repite lo mismo: “(ustedes, a mí, hacer) ___________________ este informe para dentro de dos horas”, o a mí directamente: “Eloísa, (tú, a mí, traer) _______________ aquellos proyectos que te pedí”. ¡Estoy harta! Cuando llego a casa, estoy deseando que cambien los papeles y poder gritar: “¡ (vosotros, ocuparse) _______________________ de vuestros asuntos, (vosotros, a mí, dejar) _______________________________ en paz!” ¡Ah! Y también añadir: “¡No (vosotros, a mí, mandar) ___________________________ nunca más! ¡De ahora en adelante, no (vosotros, usar) _____________________ el Imperativo en esta casa!”


¡ANIMAOS!
COMPROBAD QUE YA SABÉIS BIEN EL IMPERATIVO.
HACED LOS EJERCICIOS DE LAS PÁGINAS 63, 64 Y 70 DEL LIBRO MARTIN, Ivan. Síntesis 3. São Paulo: Ática, 2012.

Enviad vuestras respuestas a la dirección:




 



Ejercicio 4: Leed el texto y completad los huecos con los verbos en IMPERATIVO, en SEGUNDA PERSONA DE SINGULAR (TÚ):

ATRÉVETE A DEJAR DE FUMAR




______________ (escoger) una fecha para dejar de fumar. _________ (Hacer) cambios en tu entorno. ___________ (tirar) a la basura todo lo que te recuerde fumar: ceniceros, encendedores y, obviamente, los cigarrillos. ____________ (No dejar) que otros fumen delante de ti. ____________ (Repasar) lo que hiciste las otras veces que trataste de dejar el vicio y no pudiste. ____________ (Tomar) nota de lo que te ayudó y de lo que falló. _____________ (Hablar) con tus amigos, compañeros de trabajo y familiares. ________________ (Contar a ellos) que quieres dejar de fumar y necesitas su cooperación. _____________ (Hablar) con tu médico o proveedor de cuidados de salud. _____________ (Buscar) asesoría. ________________ (Asistir) a un grupo de apoyo, ______________ (llamar) a las líneas telefónicas de ayuda o ________________________ (conseguir) una consulta individual con un experto.

(Adaptado de <www.univision.com>. Acceso el 28 de diciembre de 2008.) – MARTÍN, Iván. Síntesis 3. São Paulo: Ática, 2012 – p. 70.



¡ENHORABUENA! 
¡SED MUY VALIENTES!

OÍD AHORA ESTOS VÍDEOS. ELLOS OS VAN A AYUDAR A FIJAR MEJOR EL IMPERATIVO.

¡AVANTE!



Para profundizar aún más este contenido, acceded también:
https://www.youtube.com/watch?v=gbjEP79OM9M



¡Muy bien!
¡Estupendo! 

Os invito ahora a leer el texto "Las Aceitunas", de Lope de Rueda - páginas 47, 48 y 49 del libro JIMÉNEZ, Felipe B. Pedraza; CÁCERES, Milagros Rodríguez. Vamos a hablar. v. 3.








Haced los ejercicios virtuales y asistid el vídeo de la presentación de esta pieza de teatro chiquitita: "LAS ACEITUNAS", de Lope de Rueda, hecha por los alumnos Rafaela Caroline Machado y Tiago Lucca Pupia, del segundo año de Español del CELEM, en 2013, en el Colegio Estadual Profesor Francisco Zardo, en el barrio Santa Felicidad, en Curitiba - PR - Brasil.


 https://drive.google.com/open?id=16KFdXSCvL7-CFwDqS98BQZ3ZnS690J98 

y



¡MUY BIEN!
AHORA, ¿VAMOS A CANTAR?




MIRAD EL VÍDEO DE LA CANCIÓN "OLVÍDAME Y PEGA

 LA VUELTA", DE PIMPINELA (ARGENTINA).







¡Bueno!,... completad los huecos de la letra de la canción que habéis oído ahora mismo: "OLVÍDAME Y PEGA LA VUELTA".







Contestad a los ejercicios 1, 3 y 4 y enviad vuestras respuestas a la dirección:


laurajesusmc@gmail.com

Y...
¿Qué tal ver una película?

Os indico "El laberinto del Fauno", del cineasta mexicano Guillermo del Toro. Observad el uso del IMPERATIVO, principalmente en los diálogos de la madre con su hija, del Fauno con Ofelia y del Capitán con otras personas.
Sigue abajo la transcripción de algunos trocitos de estos diálogos:



"EL LABERINTO DEL FAUNO



2006 – GUILLERMO DEL TORO



España – 1944.

La Guerra Civil ha terminado (17/07/1936 – 01/04/1939).

Escondidos en las montañas, grupos armados (anarquistas) siguen combatiendo al nuevo régimen fascista, que lucha para sofocarlos. (Comunidad Autónoma de Aragón – Norte de España).



(Narrador) – Cuentan que hace mucho, mucho tiempo, en el reino subterráneo, donde no existe la mentira, ni el dolor, vivía una princesa que soñaba con el mundo de los humanos. Soñaba con el cielo azul, la brisa suave y el brillante sol.

Un día, burlando toda vigilancia, la princesa escapó. Una vez en el exterior, la luz del sol la cegó y borró de su memoria cualquier indicio del pasado. La princesa olvidó quién era y de dónde venía.

Su cuerpo sufrió frío, enfermedad y dolor. Y, al correr de los años, murió.

Sin embargo, su padre, el rey, sabía que el alma de la princesa regresaría, quizá en otro cuerpo, en otro tiempo y en otro lugar. Y él la esperaría hasta su último aliento, hasta que el mundo dejara de girar…



(Madre de Ofelia) – No entiendo para qué has traído tantos libros, Ofelia, si vamos al campo, al aire libre.  - Hm… ¿Cuentos de hadas? Ya estás mayor para llenarte la cabeza con tantas zarandajas. (pequeñeces, tonterías)  - Di que paren el coche, por favor.  - Ofelia, Ofelia… déjame un momento. Tu hermano no se encuentra muy bien. (…)


(Madre de Ofelia) – No es nada. Sólo deme un poco de agua. (…)

(El bicho de palo es también un personaje.)

(Madre de Ofelia) – Ofelia. Ofelia, ven.

(Ofelia) – He visto un hada.

(Madre de Ofelia) - ¡Pero mira cómo te has puesto los zapatos! - Vamos. Cuando lleguemos al molino, quiero que saludes al Capitán y quiero que le llames padre. No sabes lo bueno que ha sido con nosotras, hija.  (…)

(Capitán) – Anda. Hazlo por mí.

(Carmen) – Gracias. Ofelia, sal. Saluda al Capitán.

(Capitán) – Ofelia, Es la otra mano, Ofelia. - ¡Mercedes!  Que suban el equipaje. (….)

(Doctor Ferreiro) – Muy bien. Todo… Todo… Muy bien. No dude usted en llamarme si me necesita, de día o de noche. Ud. o su enfermera. Buenas noches.

(Carmen) – Por favor, cierra la puerta y apaga la luz, cariño. (…)

Mercedes – Tiene usted que subir a verlo.  La herida no mejora. La pierna se le está poniendo muy mal. (…)

(Carmen) – Ofelia, ven aquí. Virgen santísima, tienes los pies helados, mi amor.  - ¿Tienes miedo?

(Ofelia) – Un poco. (….)
(Carmen) – Algún día entenderás que para mí tampoco ha sido fácil, querida. Tu hermano está un poco inquieto. - Anda, cuéntale uno de tus cuentos. Seguro que se calma.

(Ofelia) – Hermano, hermano… Hace muchos, muchos años, en un país muy lejano y triste, existía una enorme montaña de piedra negra y áspera. Al caer la tarde, en la cima de esa montaña, florecía todas las noches una rosa que otorgaba la inmortalidad. Sin embargo, nadie se atrevía a acercarse a ella, pues sus numerosas espinas estaban envenenadas. Entre los hombres sólo se hablaba del miedo a la muerte, y el dolor, pero nunca de la promesa de la inmortalidad. Y todas las tardes, la rosa se marchitaba, sin poder otorgar sus dones a persona alguna, olvidada y perdida en la cima de aquella montaña de piedra negra y fría, sola, hasta el fin de los tiempos. (…)

(Capitán) – Eso lo decido yo. Descúbrete (abre-te, confesa) cuando estés delante de mí.

(Soldado) – Al detenido se le encontró este arma. Ha sido disparada.

(El hijo) – Mi padre estaba cazando conejos, Capitán.

(Capitán) – Que te calles, coño.  - ¿Ni Dios, Ni Patria, Ni Amo”?  (…)

(Fauno) - Sois vos. Sois vos. Habéis regresado. - No os asustéis, os lo ruego. - Mira. Mira.

(Ofelia) – Mi nombre es Ofelia. ¿Quién eres tú?

(Fauno) - ¿Yo? Yo… - Yo he tenido tantos nombres… - Nombres viejos que solo pueden pronunciar el viento y los árboles. - Yo soy el monte, y el bosque y la Tierra. - Soy…  - Soy un fauno. - Vuestro más humilde servidor, Alteza.

(Ofelia) – No. Yo…

(Fauno) – Vos sois la princesa Moana, hija del rey del mundo subterráneo.

(Ofelia) – Mi padre era sastre.

(Fauno) – No sois hija de hombre. - La luna os engendró. - En vuestro hombro izquierdo encontrareis una marca que lo confirma. - Por todo el mundo, vuestro verdadero padre hizo abrir portales que permitieran vuestro regreso. - Éste es el último de ellos. - Pero debemos asegurarnos de que vuestra esencia no se lo ha perdido, que no os habéis vuelto una mortal. - Habréis de pasar tres pruebas antes de la luna llena. - Éste… este es el Libro de las Encrucijadas. - Cuando estéis sola, abridlo, él os mostrará vuestro futuro, os mostrará qué hacer.

(Ofelia) – Aquí no hay nada.  (…)

(Carmen) – Anda, ve a bañarte. - Ofelia. Ofelia. - Ofelia, date prisa. Que quiero ver el vestido puesto.  - Quiero que estés preciosa cuando te vea el Capitán. - Ya verás… parecerás una princesa.  (…)

(Ofelia) – Anoche me visitó un hada.

(Mercedes) – Vaya.

(Ofelia) – Bueno, y no sólo una, había otras,  y un fauno.

(Mercedes) - ¿Un fauno?

(Ofelia) – Eso dijo. Es muy alto, muy viejo, y huele a tierra.
(Mercedes) – Pues mi abuela decía que con los faunos hay que andarse con cuidado.

(Capitán) – ¡Mercedes! - Venga conmigo.   (…)
 (Ofelia) – Al principio de los tiempos, cuando el bosque era joven, vivían en armonía los animales, los hombres y las criaturas mágicas. Se protegían los unos a los otros, y dormían juntos bajo la sombra de un frondoso árbol, que crece en la colina, cerca de un molino. Ahora, el árbol se muere. Sus ramas están secas, su tronco viejo y torcido. Debajo de sus raíces, ha anidado un enorme sapo, que no lo deja sanar. Habrás de meter las tres piedras de ámbar mágicas en su boca y recuperar una llave dorada que oculta en su vientre. Sólo así el árbol volverá a florecer.   (….)

(Ofelia) – Hola. Soy la princesa Moana y no te tengo miedo.  - ¿No te da vergüenza estar aquí abajo, comiéndote los bichitos… y engordando mientras el árbol se muere? - ¡Eh!  (…)

(Ofelia) – Ya tengo la llave. - Llévame al laberinto.  - Hola. - He traído la llave.

(Fauno) – Ése soy yo, y la niña sois vos.

(Ofelia) - ¿Y el bebé?

(Fauno) – Habéis conseguido la llave. Me alegro. Ella creyó en vos desde el principio. Le alegra mucho vuestro éxito. ¡Ah!  - Conservad la llave. La necesitaréis muy pronto. - Y también esto… un poco de tiza. - Faltan sólo dos pruebas más y la luna ya pronto estará llena. -Tened paciencia. Pronto pasearemos por los siete patios concéntricos de vuestro palacio.  (…)

(Ofelia) – Vamos, dime lo que va a pasar ahora. Dímelo.

(Carmen) – Ofelia… ayúdame…

(Soldado) – Éste es el pan de cada día en la España de Franco, el que guardamos en nuestro granero…

(Ofelia) – ¡Capitán!  ¡Capitán!

(Soldado) – Los rojos mienten, mienten al decir que en España hay hambre…

(Ofelia) – Venga. Deprisa.

(Soldado) - … porque en la España nacional, no hay un hogar sin lumbre (luz), ni una familia sin pan.
-       Éste es el pan de cada día en la España de Franco… (…)

(Capitán) – Cúrela.  - No me importa lo que necesite o lo que cueste. - Cúrela.

(Mercedes) – No te preocupes. Tu madre se pondrá buena muy pronto, ya lo verás.
-       Tener un hijo es complicado.

(Ofelia) – Pues, entonces yo nunca tendré uno. (Pues, nunca que se lo voy a tener ninguno)
-       Tú ayudas a los del monte, ¿verdad?

(Mercedes) - ¿Se lo has dicho a alguien?

(Ofelia) – No se lo dije a nadie. No quiero que te pase nada malo.

(Mercedes) – Ni yo a ti.  (…)
(Fauno) - ¡Ah! No es excusa para la negligencia. Mira… (Mirad) ésta es una mandrágora, una planta que soñaba con ser humana. Colocadla debajo de la cama de vuestra madre, en un cuenco con leche fresca. Cada mañana, dadle de beber dos gotas de sangre. Ahora lleva (llevad) a cabo la prueba. La luna llena ya está cercana. ¡Ah! … Dejaos guiar por ellas (las criaturas mágicas). Iréis a un lugar muy peligroso, tened (tener) cuidado. Lo que allí (ahí) dormita no es humano. Veréis un suntuoso (lujoso)  banquete, pero no comáis, ni bebáis nada. Absolutamente nada. Os va la vida en ello.  (…)

(Ofelia) – “Con la tiza, trazaréis el contorno de una puerta en cualquier parte de vuestra habitación.”
-       “Una vez abierta la puerta, iniciad el reloj de arena”. -  “Dejaos guiar por las hadas”.
-       “No comáis, ni bebáis nada durante vuestra estancia, y aseguraos de volver antes de que caiga el último grano de arena”. - No… Es ésta. - ¡No! ¡No!    (…)

(Pedro???)  - Yo aquí me quedo, doctor. No hay más. - Tenéis que iros.

(Mercedes) – La llave, pero no pueden bajar ahora. Eso es lo que él está esperando.

(Pedro) – Déjamelo a mí.

(Mercedes) – Soy una cobarde.

(Pedro) – No, no lo eres.

(Mercedes) – Sí, sí lo soy. Una cobarde, una mierda, todo el día metida ahí, en lo de ese hijo de puta, lavándole la ropa (lavando su ropa), haciéndole la cama, dándole de comer…
-       ¿Y si el doctor tiene razón y no podemos ganar?

(Pedro) – Por lo menos, se lo pondremos difícil a ese cabrón.   (…)

 (Capitán) – Escúcheme bien. - Si tiene que escoger, salve al niño. Ese niño llevará mi nombre y el nombre de mi padre. Sálvelo a él.  (…)

(Ofelia) – Hermano... Hermano… si me escuchas, las cosas por aquí no están muy bien. Pero ya pronto tendrás que salir. Has puesto muy mala a mamá. Cuando salgas, quiero pedirte una cosa, sólo una: Que no le hagas daño a mamá. Ya la conocerás, es muy bonita, aunque a veces esté triste muchos días. Pero ya la verás, cuando sonría. Te va a gustar mucho. Escucha, si me obedeces, te prometo una cosa: Te llevaré a mi reino y serás un príncipe. Te lo prometo. Un príncipe.   (…)

(Fauno) – No podéis regresar. La luna estará llena en tres días. Vuestro espíritu se quedará para siempre entre los hombres. Envejeceréis como ellos, moriréis como ellos, y vuestra memoria se desvanecerá en el tiempo. Y nosotros desapareceremos con ella. ¡No nos volveréis a ver jamás!  (…)

(Carmen) – Déjala. ¡Déjala, por favor!
(Capitán) - ¡Mira! ¡Mira lo que tenía debajo de tu cama! ¿Eh? ¿Qué te parece?
(Carmen) – Ofelia, ¿qué hacía esta cosa debajo de la cama?
(Ofelia) – Es una raíz mágica. Me la dio el fauno.
(Capitán) – Esto es por toda esa mierda que tú le permites leer. ¡Mira lo que has conseguido!
(Carmen) – Por favor, déjanos solas. Yo hablaré con ella, cariño.  (…)
(Ofelia) – No. ¡Quiero irme de aquí! ¡Llévame lejos de aquí, por favor! ¡Por favor, vámonos!  (…)
(Ofelia) – ¡Madre! ¡Ayuda! ¡Ayuda!
(Capitán) - ¿Por qué lo hizo?
(Doctor Ferreiro) – Era lo único que podía hacer.
(Capitán) – No. Hubiera podido obedecerme.
(Doctor Ferreiro) – Hubiera podido, pero no lo hice.
(Capitán) – Pues, hubiera sido mejor para usted. Eso lo sabe. No lo entiendo. ¿Por qué no me obedeció?

(Doctor Ferreiro) – Es que obedecer por obedecer, así, sin pensarlo… eso sólo lo hace gente como usted, Capitán.  (…)

(Ofelia) – Llévame contigo.

(Mercedes) – No, no. No puedo. - No puedo, mi niña, pero te prometo que volveré por ti.

(Ofelia) – Llévame contigo.

(Mercedes) – He oído algo. - No, parece que no es nada. Tranquila.

(Capitán) – Mercedes. Ofelia. - ¿Desde cuándo lo has sabido? ¿Eh? - ¿Cuánto tiempo te has reído de mí? ¿Eh? - ¡Vigílenla! - Y si alguien trata (intenta) de entrar, mátenla a ella primero. - Chorizo. Tabaco. - Si me lo hubiera pedido, se lo hubiera dado, Mercedes. - Quiero los nombres de los que han escrito estas cartas, y los quiero delante de mí mañana.

(Garcés) – Sí, mi Capitán.
(Capitán) – Retírese, Garcés.    (…)
(Capitán) - ¡No! (¡Cójala!) - ¡Vamos, tráiganmela!  - ¡Tráiganmela, coño!
(Soldado) - ¡A las monturas!

(Soldado) – ¡Vamos! ¡Vamos! - Va a ser mejor que vengas conmigo por las buenas. - El Capitán me ha dicho que si te portabas… No hagas tonterías, bonita, que si alguien te va a matar… prefiero ser yo.

(Fauno) – He decidido daros otra oportunidad. - ¿Prometéis obedecerme? - ¿Haréis todo lo que yo os diga sin cuestionarlo? - Es vuestra última oportunidad. - Entonces escuchadme bien. - Recoged a vuestro hermano y traédmelo al laberinto lo antes posible, Alteza.   (…)
(Ofelia) – La puerta está cerrada.
(Fauno) – En ese caso… haced vuestra propia puerta.   (…)
(Ofelia) – Nos vamos a ir de aquí. Tú y yo juntos. - No tengas miedo. - No te va a pasar nada.
(Capitán) – Vigilen el perímetro del bosque. - Cuando vuelva una de las patrullas, quiero verles, - Comuníquese por radio con el Teniente Coronel. - Necesitamos apoyo urgentemente.
(Soldado) – Sí, mi Capitán.
(Capitán) - ¡Déjalo!
(Mercedes) – ¡Ofelia!
(Fauno) - ¡Rápido, Alteza! ¡Entregádmelo ya!  - La luna llena brilla en el cielo, y podemos abrir el portal.
(Ofelia) - ¿Qué llevas en la mano?
(Fauno) – Oh… El portal sólo se abrirá si derramamos en él sangre inocente. - Sólo un poco de sangre, un pinchazo, tan sólo. - Es la última prueba. - Vamos. - ¡Prometisteis obedecerme sin chistar!  - ¡Entregadme al niño!
(Ofelia) - ¡No! Mi hermano se queda conmigo. (…)
(Fauno) – Hágase pues vuestra voluntad, Alteza.
(Ofelia) – No.
(Capitán) – Mi hijo. - Decidle a mi hijo… - Decidle a qué hora murió su padre. - Decidle que yo…
(Mercedes) – No. Ni siquiera sabrá tu nombre.
(Padre de Ofelia) – Poneos de pie, hija mía. - Acercaos."



Netflix ofrece la posibilidad de ver esta película durante un mes gratis en la dirección:

https://www.netflix.com/watch/70050507?trackId=13752289&tctx=0%2C0%2C88bcbd4ed86fed78f149b5a4e8c800ce6e38b03b%3A77e82d134f32a7e3da47a165e2e9600d3f887b1f%2C%2C

¿Os gusta la poesía?

Entonces, leed el poema "El Árbol de Buena Onda", de autor desconocido, y cambiad la persona: de USTED para ..
 

"Árbol de la Buena Onda
  • Vaya a caminar. Sonría a un niño


 Haga su álbum familiar. Cuente las estrellas

  • Mime a los que ama. Llame a sus amigos por teléfono
  • Dígale a alguien "Te quiero mucho". Hable con Dios. Sea
  • un niño otra vez. Salte a la cuerda. Borre la palabra "Rencor". Diga
  • que si. Ríase. Lea un buen libro. Pida ayuda, corra. Cumpla sus promesas.
  • Cante una canción. Anote los cumpleaños. Ayude a un enfermo. Salte para
  • divertirse. Exprese lo suyo. Trátese como un amigo. Escriba una tarjeta cariñosa.
  • Visite a un hermano. Sueñe despierto. Apague el televisor y hable. Permítase equivocarse.
  • Devuelva una amabilidad. Escuche a los grillos. Agradezca a Dios por el sol. Acepte un cumplido.
  • Perdónese. Deje que alguien lo cuide. Muestre su felicidad. Aprenda algo que siempre deseo. Tóquese
  • la punta de los pies. Mire una flor con atención. No diga "No puedo" por un día. Cante en la ducha.
  • Viva cada minuto. Felicite a alguien. Empiece una tradición familiar. Ofrézcale ayuda a
  • alguien. Hoy día decida no preocuparse. Intente cocinar e invite a sus amigos. Ayude a una
  • anciana del barrio. Aliente a su niño. Mire fotos viejas. Escuche a un amigo.
  • Imagine las olas de la playa. Juegue con su mascota.
  • Dese una palmada en la espalda. Grite
  • por su equipo favorito.
  • Pinte un Cuadro. Salude
  • a un nuevo vecino.
  • Cambie algo.
  • Haga sentirse
  • bienvenido a alguien.
  • Permita que lo ayuden.

·                Sepa que no está solo. Regálese algo.

  • No diga "Estoy cansado". Sonría. Agradezca. Trate de ser feliz.
  • Aunque no lo tenga siempre presente, hay un montón de cosas que pueden hacerse
para sentirse bien y mejor cada día, ¿no?"

-------------------
 
Ahora..., haced lo mismo con este otro poema, pero debéis cambiar del para el USTED.


Ríe
Perdona
Relájate
Pide ayuda
Haz un favor
Delega tareas
Expresa lo tuyo
Rompe un hábito
Haz una caminata

Sal a correr
Pinta un cuadro. Sonríe a tu hijo
Permítete brillar. Mira fotos viejas
Lee un buen libro. Canta en la ducha
Escucha a un amigo. Acepta un cumplido
Ayuda a un anciano. Cumple con tus promesas

Termina un proyecto deseado
Sé niño otra vez. Escucha la naturaleza
Muestra tu felicidad. Escribe en tu diario
Trátate como a un amigo. Ama a los animales
Haz un álbum familiar. Date un baño prolongado
Por hoy no te preocupes. Deja que alguien te ayude
Mira una flor con atención. Pierde un poco de tiempo
Apaga el televisor y habla. Escucha tu música preferida

Aprende algo que siempre deseaste
Llama a tus amigos por teléfono. Haz un pequeño cambio en tu vida
Haz una lista de las cosas que haces bien. Ve a la biblioteca y escucha el silencio
Cierra los ojos e imagina las olas de la playa. Hazle sentir bienvenido a alguien

Dile a las personas amadas cuánto las quieres
Dale un nombre a una estrella
Sepas que no estás solo
Piensa en lo que tienes
Hazte un regalo
Planifica un viaje
Respira profundo
Cultiva el amor
POR ÚLTIMO... SONRÍE
                                                  
(tomado de internet de autor desconocido)


Escribe los imperativos que aparecen en el arbolito en la tabla que aparece aquí debajo. Todos esos imperativos, están en forma informal (tratamiento de ). Observa que también hay un imperativo negativo. Después, escribe la forma correspondiente del imperativo formal (tratamiento de usted).



VERBOS EN INFINITIVO PRESENTES EN EL ÁRBOL DE NAVIDAD
IMPERATIVO INFORMAL (TÚ)
IMPERATIVO FORMAL (USTED)
REIR
ríe
ría
PERDONAR
perdona

RELAJAR(SE) tú


PEDIR ayuda


HACER un favor


DELEGAR ideas


EXPRESAR lo tuyo


ROMPER un hábito


HACER una caminata


SALIR a correr

salga
PINTAR un cuadro


SONREIR a tu hijo


PERMITIR(TE) brillar


MIRAR fotos viejas


LEER un buen libro

lea
CANTAR en la ducha


ESCUCHAR a un amigo


ACEPTAR un cumplido


AYUDAR a un anciano


CUMPLIR con tus promesas


TERMINAR un proyecto deseado


SER un niño otra vez

sea
ESCUCHAR la naturaleza


MOSTRAR tu felicidad


ESCRIBIR un diario


TRATAR(TE) como un amigo


AMAR a los animales


HACER un álbum familiar

haga
DAR(TE) un baño prolongado


DEJAR que alguien te ayude


No PREOCUPARSE

No te preocupes

No se preocupe

MIRAR una flor


PERDER un poco de tiempo


APAGAR el televisor


HABLA



ESCUCHAR tu música preferida


APRENDER algo


LLAMAR a tus amigos


HACER un pequeño cambio


HACER una lista


IR a la biblioteca

vaya
ESCUCHA el silencio


CERRAR los ojos


IMAGINAR las olas


HACER SENTIR


DECIR(LE) que lo quieres


DAR(LE) un nombre

dele
PENSAR en lo que tienes


SABER que no estás sólo

sepas
sepa
HACER(TE) un regalo

hágase
PLANIFICAR un viaje


RESPIRAR profundo


CULTIVAR el amor


SONREÍR


 

Enviad vuestras respuestas a la dirección:


laurajesusmc@gmail.com


Leed en VOZ ALTA el poema de Gabriel Celaya y destacad con más énfasis los verbos en IMPERATIVO - Negativo o Afirmativo.
Disponible en:
https://www.google.com/search?q=No+cojas+la+cuchara+-+gabriel+celaya+poemas&tbm=isch&source=univ&sa=X&ved=2ahUKEwjO3ejD27bhAhV4GbkGHSkHBlgQsAR6BAgJEAE&biw=1056&bih=482#imgrc=wzbEMKzJE8C5DM: - Accedido el 28/03/2019.




¡Bueno!... Por fin, buscad en Internet una RECETA DE LA GASTRONOMÍA HISPÁNICA (española o hispanoamericana) y compartidla con nosotros en el espacio de "PUBLICAR UN COMENTARIO" ABAJO, destacando el país del origen de la receta.


EVALUACIÓN FINAL

Haced un vídeo de hasta cinco (5) minutos con la grabación de vuestra interpretación de un diálogo o explicando como se hace algo de comer, utilizando verbos en el IMPERATIVO. El contenido de este vídeo puede ser una creación propia de vosotros o una dramatización de algo ya existente. Podéis hacerlo individualmente o en grupos de dos, tres o cuatro alumnos.


Enviad vuestros vídeos o su respectiva dirección en el YouTube a mi dirección electrónica:

 ¡GRACIAS POR VUESTRAS COMPAÑÍAS!

¡ENHORABUENA QUE LLEGASTÉIS HASTA AQUÍ!

¡ESPERO VEROS EN EL PRÓXIMO CURSO!

¡HASTA LUEGO!

Gran abrazo a todos y todas.

 Profesora Laura Jesus de Moura e Costa.

6 comentarios:

LIBRO DE POEMAS - 9-B - AÑO 2019 - ALUMNOS DEL CEP - COLEGIO ESTADUAL DE PARANÁ.

LIBRO DE POEMAS – GRUPO: 9º - B – 2019. COLEGIO ESTADUAL DE PARANÁ.  CURITIBA-PR – BRASIL. Organizado p...